Pese a que no tengamos ninguna patología en el ámbito ocular, es recomendable acudir a una clínica oftalmológica en Madrid periódicamente, para evitar cualquier tipo de problema futuro en la vista. El tiempo que pasa entre cada revisión dependerá de la edad. Sin embargo, si en algún momento encuentras indicios extraños en tus capacidades visuales, deberás acudir inmediatamente al oftalmólogo.
Periodicidad en las visitas a una clínica oftalmológica en Madrid
Dependiendo de la edad, en los niños es recomendable que acudan cuando son pequeños y están en el colegio, ya que, según los estudios, sus fracasos escolares se basan, en muchos casos, en una mala visión.
Por su parte, los niños deberán acudir, al menos, una vez antes de cumplir los 6 años a una clínica oftalmológica en Madrid. En esta primera revisión se sopesan las necesidades del niño, por si en algún caso necesita gafas. Además, si percibe algún problema en los ojos del niño, la visita al oftalmólogo deberá ser inmediata y obligatoria.
En la etapa adolescente y adulta es conveniente visitar una clínica oftalmológica en Madrid cada dos años. En cambio, si padece de enfermedades como la diabetes, la revisión será cada año. Por el contrario, se debe acudir de inmediato en casos extremos de problemas oculares como un aumento grande y repentino de la graduación.
En estas revisiones se controlará los niveles de presión intraoculares, así como la visión de cerca y de lejos.
Durante la tercera edad (de los 60 en adelante) se visitará una clínica oftalmológica en Madrid si no se nota ninguna disminución de la visión, sobre todo, de cerca, cada año. En cambio, las revisiones pasarán a ser cada año si se encuentran enfermedades de la vista propias a estas edades como cataratas.
Motivos por los que hay que ir a una clínica oftalmológica en Madrid
En el momento en el que empieces a ver una especie de manchas o puntos flotantes constantemente. Son unas partículas de sangre, células o suciedad que se encuentran acumuladas en el humor vítreo y proyectan las sombras en la retina.
Si tienes el síndrome del ojo seco, es decir, una irritación y sequedad constante. Este problema se suele producir cuando el ojo necesita más humedad en su superficie y lubricación.
Cuando has expuesto el ojo, sin querer, a sustancias químicas. Podrían ser tóxicas y lo primero que hay que hacer, cuando nuestro ojo entra en contacto con esas sustancias, es aplicarle agua fría y limpiarlo. Inmediatamente después, lo conveniente será acudir al oftalmólogo para evitar problemas mayores.
Con dolores repentinos en el ojo o si hay derrames en el ojo muy constantes habrá que acudir a nuestra clínica de oftalmología en Madrid de confianza para que el experto haga una revisión adecuada.
Si comienzas a ver halos alrededor de las luces es mejor que acudas a tu oftalmólogo. Puede ser causado por un problema con las gafas o las lentillas, eso en los casos menores. En otras circunstancias puede tratarse de problemas de presión ocular mayores, etc.
Por último, otros casos en los que es obligatoria la visita al oftalmólogo son: la aparición de orzuelos, repentina sensibilidad a la luz o una pérdida constante y brusca de visión.
Estas son las razones por las que debemos acudir al oftalmólogo y la periodicidad según nuestra edad. En nuestra clínica oftalmológica en Madrid queremos que tus problemas se solucionen y, por ello, contamos con los mejores expertos oftalmólogos y las máquinas más innovadoras para cada tratamiento y revisión. Te estamos esperando.
