No importa la edad, el sexo o el número de veces que se haya acudido al médico de cabecera. Si en los 365 días del año que se dibujan en la agenda, no figura la palabra oftalmólogo u oculista, se corre el riesgo de no detectar a tiempo los principales problemas oculares, por lo que el tratamiento se puede complicar en los más jóvenes, ante un diagnóstico como el ojo vago, y en los adultos, que se enfrentan a un glaucoma o cataratas. Por ello, desde clínica oftalmológica Ocumed, te indicamos por qué es fundamental cuidar la vista, uno de los sentidos más sensibles al paso del tiempo, mediante la prevención.
La importancia de detectar pronto los defectos oculares
Para llevar a cabo una buena prevención, sólo hay que planificar las visitas regulares al oftalmólogo, que serán bianuales en las primeras etapas de la vida y anuales si hay que tratar un defecto visual o si se ha rebasado la franja de los 40 años. Un examen integral y periódico de la vista que incluya pruebas de agudeza visual, un estudio del fondo del ojo y otras exploraciones, en función de la alteración a tratar, previene enfermedades oculares graves y son la vía para frenar su evolución. Con este fin, los oftalmólogos descartamos y tratamos los posibles trastornos oculares de acuerdo a cada edad. Te mostramos 5 motivos por los que acudir a una clínica oftalmológica:
1.Prevenir los defectos refractivos en la infancia
En los niños más pequeños, a partir de los 6 meses de edad, las visitas al especialista tienen como objetivo prevenir el desarrollo del ojo vago y tratar el estrabismo desde los primeros meses de vida. Durante la infancia, pueden aparecer los primeros defectos refractivos: miopía, hipermetropía y astigmatismo, causantes de una mala visión que puede dificultar el rendimiento académico. Se estima que entre el 15% y el 30% del fracaso escolar se puede achacar a problemas de visión.
2.Compensar las alteraciones refractivas en la adolescencia y juventud
En esta etapa, las alteraciones refractivas son más acusadas, por lo que hay que acudir cuanto antes al oftalmólogo para compensarlas con gafas o lentes de contacto. A partir de los 18 años, los defectos refractivos comienzan a estabilizarse y se puede pensar en una solución definitiva para corregirlos, como la cirugía láser que no debe practicarse antes de los 21 años.
3.Presbicia
La presbicia o vista cansada, provoca que la visión de cerca empeore y sea más borrosa. A este trastorno se le pone fin mediante el uso de gafas bifocales o progresivas, o de lentes de contacto. Se diagnostica mediante un examen integral de la vista. La persona con presbicia que no acude al oftalmólogo puede sufrir mareos, dolor de cabeza, irritación, enrojecimiento de los ojos e, incluso, un molesto dolor ocular.
4.Detectar a tiempo el glaucoma
El glaucoma no produce dolor, ni pérdida brusca de visión, ni ningún otro síntoma y avanza de forma silenciosa. Es la segunda causa de ceguera en el mundo, por lo que su detección a tiempo es clave. En España, cerca de un millón de personas podrían sufrir glaucoma, aunque muchas de ellas lo desconocen.
5.Tratar las cataratas
Las cataratas son muy habituales en las personas mayores. Afectan a más del 50% de la población de entre 65 y 75 años y a más del 70% de las personas de más de 75 años. Si no se operan, la visión es cada vez más densa y empeora. El retrasar demasiado la cirugía aumenta la posibilidad de complicaciones.
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Acude a nuestra clínica oftalmológica Ocumed. Somos una referencia con más de 25 años de experiencia en el tratamiento de enfermedades oculares. Nuestro centro se ha convertido en referencia nacional gracias al esfuerzo y a la dedicación a nuestros ideales. Contacta con nosotros sin compromiso. Acudimos anualmente al dentista para hacer una revisión periódica, ¿por qué no al oftalmólogo? ¿Son más importantes los dientes que los ojos?
